La incertidumbre en Estados Unidos ha generado un aumento en la demanda de bonos del Tesoro, lo que ha hecho subir su rendimiento.
Incertidumbre en el mercado de renta fija
El mercado de renta fija ha reaccionado a la incertidumbre con respecto a los pasos que tomará el gobierno de Estados Unidos. El aumento de la volatilidad ha provocado un aumento en la demanda de bonos del Tesoro, lo que ha llevado a un incremento en el rendimiento a 10 años desde el 4,8% a mediados de enero hasta el 4,15% y luego estabilizándose en torno al 4,3%.
Dudas en torno a la renta fija corporativa
Ante esta situación, los inversionistas en bonos se preguntan si deben buscar rendimientos en la renta fija corporativa o adoptar un enfoque más conservador y optar por bonos de alta calidad. Walter Molano, economista jefe de BCP Securities, expresó esta incertidumbre al afirmar que «si tengo que elegir, me gusta más rendimiento, pero hoy la volatilidad es muy alta. Es un buen año para tomarse vacaciones y volver en 2026».
Posturas cautelosas y preferencia por bonos de calidad
A pesar de la preferencia por rendimientos, muchos inversionistas están optando por una postura cautelosa. La incertidumbre económica global y la volatilidad en los mercados están llevando a muchos a priorizar bonos de calidad. Ignacio Mieres, jefe de análisis en XTB LATAM, argumenta que la combinación de factores como la debilidad de los datos de Estados Unidos y la incertidumbre sobre la deuda en Alemania, favorecen activos refugio como bonos gubernamentales y deuda corporativa con grado de inversión.
Jorge Ángel Harker, analista de mercados internacionales de Adcap Grupo Financiero, coincide con esta postura y añade que, dado el posible momento de desaceleración económica, es preferible que los inversionistas conservadores o moderados se posicionen en bonos de grado de inversión. Sin embargo, Harker también reconoce que estos bonos están caros en comparación con décadas anteriores.
El bróker argentino Balanz Capital también recomienda bonos de corto plazo, de uno a tres años, siendo cautelosos a pesar de la mejora en las tasas de interés a largo plazo. Por otro lado, aquellos con un perfil más agresivo pueden encontrar oportunidades de alta rentabilidad, siempre y cuando sean cuidadosos en ese espacio.
Bonos del Tesoro como refugio ante la incertidumbre
El interés renovado en bonos del Tesoro indica que los inversores están protegiéndose contra la creciente incertidumbre. Además, la posibilidad de una bajada de las tasas por parte de la Reserva Federal vuelve a estar sobre la mesa. Si los datos económicos continúan relajándose, se espera que los bonos sigan actuando como un estabilizador clave en las carteras de inversión.