El calcio es un elemento esencial para nuestro cuerpo y especialmente para nuestros huesos. Aunque la leche es una fuente conocida de calcio, hay otros alimentos que también pueden proporcionarlo.
La importancia del calcio en nuestro cuerpo
El calcio es fundamental para la formación y mantenimiento de los huesos y los dientes. Representa el mineral más abundante en nuestro cuerpo, con el 99% del calcio presente en la estructura ósea. La falta de calcio puede causar problemas como el raquitismo en niños y la osteoporosis en adultos mayores.
La leche y sus derivados, como el yogur y el queso, son conocidos por su contenido de calcio. Por ejemplo, 125 gramos de yogur natural bajo en grasa pueden proporcionar aproximadamente 248 miligramos de calcio.
- Otras fuentes vegetales de calcio incluyen el brócoli, el kale, la berza y la ortiga.
- El pescado, como las sardinas, también puede ser una fuente inesperada de calcio debido a los huesos.
- Bebidas como la leche de soja y la leche de almendras también pueden contener calcio, especialmente si están enriquecidas.
- Algunos alimentos, como lácteos, zumos y harinas, pueden estar enriquecidos con calcio.
Además de la cantidad de calcio en los alimentos, es importante tener en cuenta que nuestro cuerpo no siempre absorbe todo el calcio disponible. La vitamina D también juega un papel crucial en la absorción del calcio.
En conclusión, existen muchas fuentes de calcio disponibles más allá de la leche y sus derivados. Incorporar estas fuentes diversas de calcio en nuestra dieta puede ayudar a mantener huesos y dientes saludables, así como a cumplir con nuestras necesidades diarias de este mineral esencial.