Un hombre de nacionalidad venezolana fue condenado a seis años de prisión por secuestrar a un matrimonio de adultos mayores en un hotel de Arica. El hombre retuvo a las víctimas, las amenazó con armas blancas y exigió la entrega de objetos de valor durante casi dos horas. El tribunal dio por acreditado que el delincuente intentó ingresar al departamento en el que ambos se encontraban y que uno de los adultos mayores fue intimidado con cuchillos en la cocina. Pese a los intentos de escapar, el hombre fue arrestado por Carabineros.
El secuestro y las amenazas
El hombre fue condenado después de un proceso judicial que determinó su culpabilidad en el delito de secuestro con imposición de exigencias. El incidente ocurrió el 24 de diciembre de 2023 en el hotel Valle de Azapa, en la ciudad de Arica. Las víctimas, un matrimonio de 67 y 65 años, intentaron ahuyentar al delincuente cuando vieron que este intentaba ingresar a su departamento. Sin embargo, el hombre logró entrar y en el interior amenazó al matrimonio con armas blancas.
En un momento, uno de los adultos mayores forcejeó con el secuestrador y fue llevado a la cocina, donde fue amenazado con dos cuchillos. Como resultado, el matrimonio quedó inmovilizado durante casi dos horas, mientras el delincuente exigía la entrega de objetos de valor. A pesar de las amenazas de muerte, uno de los adultos mayores logró pedir ayuda a gritos, lo que fue escuchado por un empleado del hotel, quien alertó a Carabineros.
La intervención de Carabineros y el arresto del delincuente
Carabineros respondió rápidamente a la llamada de auxilio y llegó al lugar para negociar con el secuestrador. Durante estos minutos, el delincuente exigió una recompensa y poder escapar del lugar a cambio de liberar a las víctimas. Sin embargo, las autoridades no cedieron a sus exigencias y el tiempo de retención se prolongó hasta las 06:52 horas. Fue en ese momento cuando Carabineros ingresó al inmueble y logró arrestar al secuestrador.
El tribunal oral penal de Arica emitió un fallo unánime, declarando culpable al hombre y condenándolo a seis años de presidio efectivo por el delito de secuestro con imposición de exigencias. La condena es una muestra de la gravedad de los actos cometidos por el delincuente y envía un mensaje claro de que este tipo de actos no serán tolerados en la sociedad.