El acceso no autorizado de aplicaciones al micrófono de nuestros teléfonos es una preocupación creciente. Aprender a gestionar los permisos de aplicaciones en iPhone y Android es esencial para proteger nuestra privacidad y evitar posibles espionajes.
¿Por Qué las Aplicaciones Solicitan Permisos?
Cuando instalamos una aplicación, ésta suele requerir autorizaciones para funcionar correctamente. Aplicaciones como Uber necesitan acceder a la ubicación, mientras que otras, como las de mensajería, requieren permisos para el micrófono o la cámara. Sin embargo, es crucial detectar accesos ocultos si una aplicación solicita permisos que no se alinean con sus funciones, ya que esto podría indicar un intento de recopilar datos sin nuestro consentimiento.
Revisar Permisos en iPhone
- Asegúrate de tener instalado al menos iOS 15.2.
- Ve a Configuración > Privacidad > Micrófono.
- Verifica qué aplicaciones tienen acceso y desactiva aquellas innecesarias.
En iOS, un punto naranja indica acceso al micrófono. Si ves esto mientras no estás usando la app, podría ser una señal de alerta.
Controlando el Acceso en Android
- Abre Configuración > Aplicaciones (puede ser ‘Ver todas las aplicaciones’).
- Selecciona la aplicación a revisar.
- Accede a Permisos > Micrófono y ajusta según tus preferencias.
Android proporciona un administrador de permisos que ofrece una visión clara de las aplicaciones que acceden al micrófono, ayudándote a mantener el control.
Señales de Acceso No Autorizado
En dispositivos modernos, notificaciones visuales alertan de usos ocultos. En iOS, un punto verde indicará acceso a la cámara, mientras que uno naranja se refiere al micrófono. Android también ofrece indicadores en la barra de estado que notifican de espionajes potenciales.
Recomendaciones de Seguridad Cibernética
Expertos como Erich Kron de KnowBe4 subrayan la importancia de actualizar siempre el sistema operativo y desconfiar de políticas de privacidad vagas. Mantenerse alerta a notificaciones extrañas y revisar permisos regularmente son pasos cruciales para salvaguardar nuestra información.
En resumen, la privacidad es una responsabilidad compartida. Aprovecha las herramientas disponibles y permanece vigilante para proteger tu información en un mundo digital constantemente amenazante.