Las floristas ubicadas en la calle Serrano en Puerto Montt están enfrentando una ola de robos y daños a sus negocios. La falta de medidas de seguridad ha llevado a los ladrones a llevarse cámaras de vigilancia y hasta las paredes de los kioscos. Las emprendedoras han tenido que tomar medidas extremas para proteger sus negocios.
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Aumento de la inseguridad y la falta de prevención
Las floristas se enfrentan a una creciente ola de delitos en la zona. Cada vez más, sus negocios son blanco de robos y vandalismo. Han tenido que instalar latas y fierros de protección para reforzar sus kioscos y evitar nuevos daños. La falta de prevención y la impunidad han llevado a que los actos delictuales no cesen.
Historias de afectadas por la inseguridad
Javiera, dueña del local «Javita», describe cómo constantemente su negocio ha sido afectado por robos y daños. Las paredes han sido desarmadas y sustraídas, y los forados son constantes. Lilian, de la florería «Fernandita», relata cómo tuvo que reforzar su espacio de trabajo después de que le rompieron la puerta. Marisel Toledo ha perdido la cuenta de cuántas veces ha sido robada, y las denuncias no han llevado a ninguna acción.
- Rosa Ahumada, del local «Pivonca», ha reforzado los marcos de las puertas.
- Lina Mansilla, de la florería «Idéalo», ha sufrido tres o cuatro robos, y ha tenido que enrejar su local.
Las floristas esperan que las autoridades tomen medidas para resolver este problema de inseguridad en la zona. También expresan preocupación por la falta de iluminación pública adecuada y la ocupación clandestina del terreno donde se pretende construir el Parque Metropolitano.
