El precio del café arábica alcanza récord por escasez y regulaciones

El precio del café arábica ha experimentado un ascenso récord debido a factores climáticos y regulaciones que han afectado la oferta global.

Sequía en Brasil y nuevas regulaciones afectan la producción

Brasil, el mayor productor mundial de café arábica, ha sufrido una sequía prolongada que ha causado un déficit en el sector.

  • La producción de café arábica en Brasil se reducirá un 12.4% en comparación con el año pasado.
  • Estados líderes en la producción, como Minas Gerais y São Paulo, también enfrentarán disminuciones significativas.
  • Las condiciones climáticas adversas han reducido la productividad media de los cafetales en un 11%.

Además de los problemas climáticos, las nuevas regulaciones, como la Regulación de Deforestación de la Unión Europea, han restringido la oferta de café a nivel global.

Escasez de oferta y problemas logísticos ejercen presión sobre los precios

El mercado del café ha experimentado una confluencia de factores que han generado una situación de escasez y precios al alza.

Problemas logísticos, como el bloqueo del Mar Rojo y la congestión en los puertos, han agravado la sensación de escasez.

  • Los tiempos de tránsito prolongados han generado cuellos de botella en el suministro.
  • Las coberturas del mercado y la acumulación de inventarios también contribuyen a la presión sobre los precios.

Pronóstico y perspectivas a largo plazo

Se espera que los precios del café se mantengan altos en el corto plazo debido a la escasez de oferta.

Sin embargo, a largo plazo, se espera que la producción se estabilice y que los precios se equilibren a medida que más productores aumenten su oferta.

Factores como el clima en Brasil y el fenómeno de La Niña en Vietnam pueden influir en la evolución del mercado.

Se pronostica que el diferencial de precios entre el café arábica y el robusta se cerrará en los próximos meses.

En general, se espera que el mercado del café experimente una moderación en la segunda mitad de 2025, aunque la volatilidad y las tensiones comerciales pueden influir en los precios a corto plazo.

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